Entre bastidores del Grand Trawler 62

Barco único, el Grand Trawler 62 se ha beneficiado de un cuidado y de una atención mantenida durante las etapas de su concepción. Su construcción ha sido realizada según un proceso innovador. Nosotros le desvelamos aquí, los secretos de fabricación de este barco fuera de lo común. Palabras de expertos.

El papel del Gabinete de Estudios, del Diseñador y del Arquitecto Naval

Silueta tranquilizadora y equilibrada, carena eficiente y confortable, generosidad en los volúmenes habitables … El Grand Trawler 62 concretiza el formidable trabajo de estudios y de concepción realizado por BENETEAU y sus colaboradores para llegar a este perfecto dominio de la fabricación de un gran barco de viaje. Es el fruto de un largo y riguroso proceso de creación y de realización, empezado en abril 2018. En función de las etapas, han sido entre 10 y 20 expertos que han trabajado en la elaboración del trawler almirante. 

« Nosotros proponemos un nueva forma de navegación. Nuestro objetivo no es conseguir los 25 o 30 nudos, es crear un barco donde los pasajeros se sientan bien, con un comportamiento adaptado a todas las situaciones y disponiendo de una muy buena autonomía », indica el arquitecto naval Amedeo Migali, del gabinete MICAD « Para este barco, el consumo de  carburante debía ser muy bajo, ajustado a una velocidad de crucero de 10 nudos, para economizar. Nosotros estamos cada vez más preocupados por los esfuerzos que debemos realizar para respetar el planeta y las generaciones futuras », prosigue el diseñador italiano.

Las grandes etapas de fabricación del Grand Trawler 62

Es en Monfalcone, cerca de Venecia, en Italia, donde se construye el Grand Trawler 62.  En una fábrica ultra-moderna dedicada a la producción de las grandes unidades del Grupo Beneteau, como los yates de la lujosa marca Monte Carlo Yachts o los soberbios veleros firmados CNB. Las líneas de producción del Grand Trawler siguen un proceso eficaz e innovador, puesto en marcha por equipos de artesanos experimentados y  operarios acostumbrados a las exigencias de la construcción naval de alta gama. Vean a continuación las grandes etapas :

El equipo de los grandes moldes. Una vez realizados, los grandes moldes del casco, de la cubierta y del flybridge son equipados con los elementos técnicos (cableado electrónica, tuberías, climatización, etc.), después acoplados con sus contra moldes.

Estos contra moldes son esenciales para reforzar la rigidez estructural del futuro barco. Delimitan los suelos, los mamparos y los techos, elementos fijos detrás de los cuales son integrados los sistemas de ingeniería. Una de las características de la construcción del Grand Trawler 62 en Monfalcone es que el casco, la cubierta y el fly son configurados como islotes independientes. Los diferentes espacios interiores que componen el barco están realizados paralelamente en módulos, que son integrados a medida que avanzan los trabajos.

Tomemos el ejemplo de un espacio completo como un aseo, que será integrado al lugar del casco que le está asignado, a continuación unido a las estructuras ya en su sitio. Secuencias equivalentes son operadas para los elementos más técnicos como los depósitos, los motores o la maquinaria.

El proceso industrial es el mismo en el islote consagrado a la cubierta/timonería, donde están integradas integradas la cocina equipada o la escalera interior que lleva al flybridge. Idem para el islote del Fly, donde la consola de pilotaje pre-instalada y el mueble del bar están fijados y conectados.

El Grand Trawler 62 en su cadena de producción en la fábrica italiana de Monfalcone

El ensamblaje de estos tres bloques. El casco es recubierto por la cubierta, ella misma cubierta por el fly. Los operarios realizan a continuación directamente a bordo, las últimas conexiones de las redes y los acabados.

A lo largo de todo este proceso de ensamblaje, los equipos prueban sistemáticamente los elementos colocados y realizan múltiples controles de calidad.

El ensamblaje del casco, de la cubierta y del fly.

La botadura. Cuando sale el barco terminado del hall de producción para ser puesto al agua, comienzan entonces la serie de pruebas en el mar, las calibraciones y los últimos ajustes.

Botadura del Grand Trawler 62 cerca de la fábrica

Un nuevo enfoque de los volúmenes y de los interiores

« El verdadero lujo hoy, es vivir de una forma que le permita disfrutar de su tiempo. Este lujo, es sinónimo de espacio, de paisaje, de luz.  Es también poder compartir su vida con su familia y sus allegados de la forma más agradable. » Este es el credo de Massimo Gino, del estudio Nauta Design, que fue el encargado por  BENETEAU para concebir los interiores y el estilo del Grand Trawler 62.

Gracias a una muy generosa manga 5,45 m en total, dobla las ventajas de un casco con desplazamiento de 18,95 metros de largo, el volumen interior del yate se abre a 235 metros cúbicos. En este bello entorno, Nauta Design ha creado un interior confortable y luminoso, racional y cálido. « Cada espacio de este barco posee una ergonomía óptima. Nada es superfluo, cada elemento tiene una utilidad », prosigue el Diseñador italiano. Salón en unión directa con el exterior, verdadero espacio comidas, cocina separada, puesto de gobierno único…  Desarrolladas en una superficie de 31,5 m², estas zonas de vida interiores están a la vez separadas y conectadas la una con la otra. Propuesto en versión de tres o cuatro camarotes, el barco dispone de una altura bajo bao favorecedora. La suite del propietario hace 14 m² (sin el aseo). Misma generosidad, misma racionalidad para los espacios exteriores, con un flybridge de una superficie de 34m². « Uno de nuestros objetivos era abrir la bañera sobre la plataforma de baño, a fin de doblar el espacio de  vida exterior a popa. Y de crear una amplia zona lúdica, ventilada, abierta al mar », confiesa Massimo Gino.

FOCUS: el Premium Service

Un acompañamiento experto dedicado a los futuros propietarios BENETEAU

La adquisición de grandes unidades necesita en la mayor parte de los casos, un acompañamiento específico, como complemento al servicio asegurado por los concesionarios.

Se trata de proponer a los futuros propietarios una experiencia altamente cualitativa, gracias a una gestión que combina consejos personalizados, visita privada a la fábrica de Monfalcone, seguimiento de la construcción, pruebas en el mar, entrega, ajustes, y toma de posesión del yate por su propietario y/o skipper.

En BENETEAU, es Premium Service quien asegura estas prestaciones, del pedido inicial al servicio post-venta y quien juega un rol activo en la organización de eventos dedicados a los propietarios, a semejanza de los Trawlers Rendez-vous.

 

« Nuestro equipo tiene el objetivo de crear vínculos fuertes y duraderos con nuestros clientes, y de estar a su lado antes, durante y después de la entrega de las llaves. Estamos muy implicados en la acogida a nuestros clientes en  Monfalcone, donde hemos puesto en marcha un dispositivo dedicado al Grand Trawler 62 »,  Yves Madin - Director Premium Service.

 

La botadura. Cuando sale el barco terminado del hall de producción para ser puesto al agua, comienzan entonces la serie de pruebas en el mar, las calibraciones y los últimos ajustes.

 

Publicado el 26.04.2021